Asi, el año se va al carajo. 2008, qué año agridulce. Pues me voy a México, y como una vez mas no sé si lo que vivo y siento es real, me ha dado, como en los viejos tiempos, por captar la irrealidad alrededor mio.
Quiero perderme donde nadie me conozca.
Entonces vienen conmigo mi vieja camara, mi nueva camara, mi cuaderno de anotar la vida (que no es un diario) y todo lo que pueda ayudarme,mas tarde, a maravillarme de cuan perdido estaba en este momento de la vida.
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